16 junio 2015

Laguna de Pitillas. Navarra


A menos de 15 kilómetros de la localidad navarra de Olite se encuentra la Laguna de Pitillas, un humedal que puede servir como perfecto complemento a una visita a la famosa población y su no menos famoso castillo .
Esta laguna, considerada Reserva Natural y catalogada como Zona de Especial Protección para las Aves, cuenta con una extensión cercana a las 200 Ha y pertenece en su mayor parte al municipio de Pitillas.

Rodeada de cultivos, en su mayoría de cereales, la laguna constituye un pequeño oasis que da cobijo a gran número de aves migratorias dada su estratégica localización.
Tanto en primavera como en verano se organizan visitas guíadas para mostrar la gran riqueza natural que se reúne alrededor del humedal.
Carrizos, juncos y el característico matorral mediterráneo dan cobijo a multitud de aves, bien sean habitantes habituales de la laguna, bien acudan a reproducirse o simplemente hagan un alto en el camino durante su larga travesía migratoria.






Azulones, fochas, zampullines y aguiluchos laguneros son las especies más comunes aunque también podremos observar, dependiendo de la época del año, garzas,ansares, ánades silbones, ánades rabudos, patos cuchara, bandos de grullas, limícolas...




Pero no sólo encontraremos acuáticas ya que este hábitat también reune inmejorables condiciones para otras especies como alondras, gorriones, lavanderas, petirrojos, ruiseñores, colirrojos, tarabillas, perdices y así hasta más de 100 especies diferentes.
Aunque los mamíferos son mucho más difíciles de observar, la laguna cuenta con una importante población de jabalíes, zorros, ratones, comadrejas, tejones, etc.
Los anfibios también brillan por su diversidad, algo muy importante en este tipo de ecosistemas ya que constituyen el principal alimento de muchas de las aves que allí se congregan.
Es recomendable acudir al Centro de Observación para informarse acerca de la situación de la laguna, antes de decidir la ruta a seguir.
Es importante saber qué tipo de aves podremos avistar durante nuestra visita y si existen zonas restringidas porque alguna especie pueda estar anidando en ese momento.





No debemos olvidar que nos encontramos en una Reserva Natural por lo que hay que evitar ruidos y comportamientos que puedan molestar a otros visitantes y sobre todo a los principales protagonistas del lugar: las aves.
La visita puede realizarse bien de forma libre e individual o bien a través de un grupo (entre 15 y 25 personas) comandado por un guía ornitológico.
Estas visitas guiadas se prolongan a lo largo de hora y media y deben reservarse telefónicamente (619-463450) con una antelación mínima de tres días.
El precio oscila entre 2,5 y 3,5 € por niño y adulto respectivamente.
Si por el contrario decidimos hacer el recorrido por nuestra cuenta, en el Centro de Observación podremos hacernos con un folleto para realizar alguno de los tres circuitos habilitados y que se extienden a lo largo de entre uno y cinco kilómetros. No deberemos olvidar asegurarnos de que no haya tramos cortados por inundaciones o por atravesar zonas de cría.
Durante nuestra visita el frío se hizo protagonista del recorrido y nos limitamos a seguir las orillas de la laguna observando a lo lejos varias especies de patos, garzas y otras muchas especies.
El atardecer estaba próximo y los estorninos que se retiraban a sus dormideros, cerca de la laguna, formaban las características danzas aéreas moviéndose al unísono creando un espectáculo digno de admirar.







Durante muchos minutos estuvimos embobados observando estos escuadrones avícolas perfectamente sincronizados mientras las últimas luces teñían de color cobrizo las aguas de la laguna y los carrizos adquirían un mágico color dorado.
El frío apretaba y parecía empeñado en recordarnos que era hora de marchar....

2 comentarios:

Tawaki dijo...

¡Cuánta belleza tenemos a veces al lado de casa!

aitor dijo...

Hay tantos sitios maravillosos en el mundo que es imposible visitarlos todos y a veces nos dejamos rincones que tenemos "a la vuelta de la esquina".